Interpreta a Allan y tiene su réplica en Linda, papel interpretado por María Barranco. Como muestra de los diálogos de la obra ofrecemos este cruce de frases entre los protagonistas. Allan: ¿Qué haces el sábado? Linda: Suicidarme. Allan: ¿Y el viernes? Un baile de humor e ironía en un texto escrito para el cine por Woody Allen.
Esta obra es como el alta médica definitiva.
Subirse al Euskalduna es el alta definitiva. A veces en la vida hay que parar, aunque no lo quieras. Ha sido una parada obligatoria, tenía que descansar y es lo que he hecho. Volver a subirme a un escenario descansado es como volver a mi lugar de juegos.
Tócala otra vez, Sam es un canto a la fragilidad del amor.
Habla de la fragilidad del amor y de cómo nos podemos enamorar de los defectos del otro. Podemos tener delante la solución de nuestra vida, pero si estamos vueltos hacia dentro, si nos estamos mirando el ombligo es prácticamente imposible buscar una solución.
Fue Woody Allen quien planteó este texto y quien le dio forma en el cine.
Es desde la inteligencia rabiosa y ácida de Woody Allen desde la que se plantean estas cuestiones. Pero nunca debes intentar imitar a un genio como él.
Además de la calidad interpretativa, ustedes comparten personaje...
Gracias, pero ya quisiera yo.
Quería decir que entre usted y Woody Allen hay grandes diferencias estéticas para un mismo texto.
Pero eso no importa, las crisis de este personaje están en su mente y en su mundo emocional. El conflicto está en su inseguridad patológica a la hora de relacionarse con los demás; y no te crea que ando yo tan lejos de ese personaje.
En un año sabático le habrá dado tiempo para curar las neurosis.
No, pero no creas, hay algunas neurosis genéticas y necesarias de las que no hay que librarse del todo.
Eso de suicidarse los sábados no va con usted, ¿no?
No, eso jamás. Me gusta la vida.
Normalmente enamorarse de los defectos de la otra parte de la pareja es lo contrario a lo que entendemos generalmente por amor.
No estoy de acuerdo contigo, cuando uno ama de verdad los defectos de los demás se convierten en características. Pienso que el termómetro que tenemos para saber si hemos dejado de amar es cuando aquello que nos producía ternura nos empieza a molestar. Ese defecto que era una característica vista a través del amor se convierte sólo en un defecto. Ahí es cuando se ha acabado ese amor o parte de ese amor.
¿Es una función totalmente sentimental y amorosa?
Al contrario, es una comedia romántica, pero él siempre está más cerca del patetismo que del sentimentalismo; se siente más cerca del ateísmo que de la creencia... Lo que sí sucede es que tiene un alma tan definida toda la obra de Woody Allen que inevitablemente hay una transformación de todos los personajes en el camino.
Veinte años ya en la capital vizcaina..
Veinte en Bilbao y celebro mi veinticinco aniversario subido en un escenario.
Bodas de plata, ¿cómo lo siente?
Jode, jode en lo personal, alegra mucho en lo profesional. Hay muchos buenos profesionales que hubieran querido poder vivir de su trabajo. Yo llevo veinticinco años comiendo de mi trabajo; a veces mejor y otras peor, pero comiendo de mi trabajo.
Durante este año de parón, también ha hecho cambios en su vida, se ha ido a vivir al campo.
Sí, pero estaba previsto este cambio. Ha coincidido con el descanso y me ha venido muy bien.
¿Respirar aire puro para oxigenarse bien?
Sí, respirar aire puro es una necesidad para oxigenarse; a veces, hay que respirar también aire contaminado también para oxigenarse. Eso depende de las necesidades de cada uno. Hay veces que hace falta cierto estrés y cierta contaminación de tu propia vida para salir al escenario y contar algo interesante. En mi caso, el año pasado lo que necesitaba era respiración.
¿Ha roto definitivamente las amarras con la televisión?
No he roto con nada. Lo que he roto es su combinación con el teatro.
Esta obra es como el alta médica definitiva.
Subirse al Euskalduna es el alta definitiva. A veces en la vida hay que parar, aunque no lo quieras. Ha sido una parada obligatoria, tenía que descansar y es lo que he hecho. Volver a subirme a un escenario descansado es como volver a mi lugar de juegos.
Tócala otra vez, Sam es un canto a la fragilidad del amor.
Habla de la fragilidad del amor y de cómo nos podemos enamorar de los defectos del otro. Podemos tener delante la solución de nuestra vida, pero si estamos vueltos hacia dentro, si nos estamos mirando el ombligo es prácticamente imposible buscar una solución.
Fue Woody Allen quien planteó este texto y quien le dio forma en el cine.
Es desde la inteligencia rabiosa y ácida de Woody Allen desde la que se plantean estas cuestiones. Pero nunca debes intentar imitar a un genio como él.
Además de la calidad interpretativa, ustedes comparten personaje...
Gracias, pero ya quisiera yo.
Quería decir que entre usted y Woody Allen hay grandes diferencias estéticas para un mismo texto.
Pero eso no importa, las crisis de este personaje están en su mente y en su mundo emocional. El conflicto está en su inseguridad patológica a la hora de relacionarse con los demás; y no te crea que ando yo tan lejos de ese personaje.
En un año sabático le habrá dado tiempo para curar las neurosis.
No, pero no creas, hay algunas neurosis genéticas y necesarias de las que no hay que librarse del todo.
Eso de suicidarse los sábados no va con usted, ¿no?
No, eso jamás. Me gusta la vida.
Normalmente enamorarse de los defectos de la otra parte de la pareja es lo contrario a lo que entendemos generalmente por amor.
No estoy de acuerdo contigo, cuando uno ama de verdad los defectos de los demás se convierten en características. Pienso que el termómetro que tenemos para saber si hemos dejado de amar es cuando aquello que nos producía ternura nos empieza a molestar. Ese defecto que era una característica vista a través del amor se convierte sólo en un defecto. Ahí es cuando se ha acabado ese amor o parte de ese amor.
¿Es una función totalmente sentimental y amorosa?
Al contrario, es una comedia romántica, pero él siempre está más cerca del patetismo que del sentimentalismo; se siente más cerca del ateísmo que de la creencia... Lo que sí sucede es que tiene un alma tan definida toda la obra de Woody Allen que inevitablemente hay una transformación de todos los personajes en el camino.
Veinte años ya en la capital vizcaina..
Veinte en Bilbao y celebro mi veinticinco aniversario subido en un escenario.
Bodas de plata, ¿cómo lo siente?
Jode, jode en lo personal, alegra mucho en lo profesional. Hay muchos buenos profesionales que hubieran querido poder vivir de su trabajo. Yo llevo veinticinco años comiendo de mi trabajo; a veces mejor y otras peor, pero comiendo de mi trabajo.
Durante este año de parón, también ha hecho cambios en su vida, se ha ido a vivir al campo.
Sí, pero estaba previsto este cambio. Ha coincidido con el descanso y me ha venido muy bien.
¿Respirar aire puro para oxigenarse bien?
Sí, respirar aire puro es una necesidad para oxigenarse; a veces, hay que respirar también aire contaminado también para oxigenarse. Eso depende de las necesidades de cada uno. Hay veces que hace falta cierto estrés y cierta contaminación de tu propia vida para salir al escenario y contar algo interesante. En mi caso, el año pasado lo que necesitaba era respiración.
¿Ha roto definitivamente las amarras con la televisión?
No he roto con nada. Lo que he roto es su combinación con el teatro.
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